lunes, 17 de diciembre de 2012

Good-Bye USA :(


Con la nueva Au Pair me la terminé llevando bien, traté de hacerle una primera semana agradable llevándola a todos lados, a comer helado, a ver películas, a Starbucks y otro par de sitios. Tuvimos una buena relación en lo poquito que pude conocerla, tanto que la llevé ese fin de semana a un cumpleaños y hasta tuvo la oportunidad de ver una stripper, juaaaa! Nunca en mi vida me había tocado ver esa cochinada, la pobre estaba impresionada mirando todo lo que esa vieja hacia.

La semana transcurrió normal, yo solo podía pensar en que era la última vez que iba a cuidar a mis mugrosos asi que traté de abrazarlos cada vez que podía y de decirles que los adoraba muchísimo.

El fin de semana pasó, yo terminé de empacar y el lunes tuve una pequeña reunión con mi HF, hicimos galletas de navidad, conversamos, nos reimos, lloramos (mi hm lloró conmigo) y me dieron un hermoso scrapbook digital con fotos mias y de los niños. Yo les entregué un par de regalos y me despedí de mi HM porque ella salía al dia siguiente muy temprano a trabajar y no la vería mas. Fue demasiado triste, no podía aguantar las lágrimas, no me la creía. De ahí me fui a comer un helado con las au pairs y esa noche llegué tranquila a dormir y a disfrutar de mi deliciosa cama.

A la mañana siguiente me levanté muy temprano, no fui capaz de dormir mucho. Alisté todo y esperé a que mi HD volviera del trabajo para llevarme al aeropuerto. No podía del dolor de estómago, me sentía horrible, nerviosa, triste, tenia una cantidad de cosas en la mente! A mis niños los abracé, les dije cuanto los quería, me despedí llorando obviamente y me fui, pero ellos aun no entendían bien que pasaba. Cole vió mis maletas y me preguntó a donde iba, yo lo único que podía decirle era que iba a estar con mi mami y el me miraba pensativo.

El viaje se me hizo eterno, los 2 vuelos tuvieron un retraso de 40 minutos cada uno, asi que llegué al aeropuerto de Medellin como a la 1am y mientras buscaba las maletas fue otra eternidad. Mi amigo me estaba esperando desde hace rato en el aeropuerto para llevarme a mi casa y cuando salimos el primer choque mental fue ver las vías de solo 2 carriles y compararlas con las de USA de 4 o 5. Finalmente toqué el timbre de mi casa a las 2am, emocionada, con cositas en el estómago y esperando abrazar a mi mamá. Se levantaron todos y cuando abrieron la puerta vieron solo mis maletas, después aparecí yo y mi mamá casi se muere. Mi papá con su cara de sueño solo me decía que muy mal hecho que les hubiera dañado las sorpresas que me tenían, pero también se alegró de verme en casa. En 10 minutos me arreglaron mi pieza, me dieron un par de regalos y como una hora después nos fuimos a dormir. Uno de los momentos mas díficiles fue cuando toqué de nuevo mi cama, antes de irme era lo mejor del mundo… pero esta vez se me hizo muy dura! Ja, me volví un poquito exigente; no pude dormir bien los primeros 2 dias pero ya me acostumbré de nuevo.

Al otro día me tocó desempacar maletas y eso me tomó casi todo el dia, al final ya estaba desesperada porque en mi viejo closet no cabía una aguja; me tocó sacar muuuuchisimas cosas para regalar. Lo único malo es que de USA me traje casi toda la ropa para el frio y aquí me ando muriendo de calor; obviamente pasar de 8°C a 27°C no es que sea fácil.

A mis amigas me les aparecí de sorpresa el jueves en la noche, nos dimos un abrazo triple y no me sentí rara para nada, nuestra amistad sigue intacta a pesar de que durante mi año en USA no tuvimos mucho contacto. En ese momento me alegré de estar aquí, porque allá ya me estaba sintiendo sola. El problema de ser au pair es que tus amigos siempre van a variar, porque cuando tu llegas hay otras niñas que están a punto de irse. Hice amigos, pero ninguna de esas amistades me hizo sentir tan cómoda como mis viejas amigas.

Volver a casa, abrir la nevera y encontrar comida de verdad, sentirme pobre y sin plata, ser una simple estudiante, montar en bus y olvidarme del jeep que manejaba, tener un poco mas de reglas, vivir con papá y mamá, sentir que mi ciudad es un pueblito donde todo el mundo se conoce… definitivamente la mente y la percepción de las cosas me cambiaron! Este año en USA me dejó mucho mas que un buen ingles. No lo repetiría, pero NO me arrepiento de todo lo que hice.

Tengo planes de volver a gringolandia, mientras tanto trataré de volver a mi vida normal. Los cambios se notarán mas adelante, asi que en un tiempo haré mi última entrada. Gracias por seguir mis historias, les saludo desde mi humilde hogar.




miércoles, 5 de diciembre de 2012

Llegó la Nueva


Terminé de “empacar” un martes en la noche y ese mismo día me mudé al basement para dejarle mi habitación limpia y lista a la nueva au pair. Se me salieron las lágrimas mientras movia todas las cosas y esa noche me sentí rarísima durmiendo en una cama diferente. Lo más triste fue cuando mis niños antes de irse dormir fueron a mi pieza y no me vieron ni vieron mis cosas.

Mis host sabían que yo no estaba ni 5 de feliz con la llegada de la nueva y que me entristecía mucho tener que mudarme al basement, asi que me traje al perro y al gato a que me hicieran compañía, aunque no sirvió de mucho porque media hora después se fueron para arriba de nuevo.

Ese viernes llegó la nueva au pair; yo no sabía ni que sentir, aún no caía en la cuenta de que mi partida llegaría pronto. Cuando la vi le di un abrazo de bienvenida que no fue muy amoroso que digamos, es extraño saludar a alguien que sabes que se va a quedar con todo lo que tu tienes ahora. La vi por 5 minutos y me fui a hacer un par de vueltas, lo primero y único que pensé es que no era bonita, (si, soy una bitch). O sea, yo quería ser nice con ella…. Pero no es mi culpa que en ese momento mi cuerpo sintiera otra cosa y lo nice no me saliera.

El sábado fuimos con mis niños y mi hm a visitar a Santa pero la nueva no quiso ir y me pareció muy mal hecho de su parte porque era su primer dia y uno no rechaza esas cosas por mas cansada que esté, pero en fin… decidí invitarla esa misma noche a una fiesta para que conociera a las au pair y aceptó feliz. Luego mis host nos invitaron a comer para darle la bienvenida y para hacer mi despedida. Yo tenia que elegir el restaurante, asi que escogí el mismo al que ellos me llevaron la primera vez, tuvimos un buen rato aunque la bebé estaba mas cansona y llorona que nunca. Creo que le ayudé a la  nueva a tener un buen primer fin de semana y estoy contenta por eso, ojalá se adapte a esta vida rápido.

Como nos toca trabajar una semana juntas, decidí decirle que yo iba a hacer todo lunes y martes, trabajaríamos juntas miércoles y ella haría todo jueves y viernes. Es un buen trato, asi le voy mostrando que hacer y cómo hacerlo; al fin de cuentas yo trabajé 1 solo dia con ayuda cuando llegué aquí; pero ella no va mal, yo se que aprender la rutina toma un poco de tiempo.

Hoy uno de mis niños me vio empacando y me dijo: “Val is going home”. Yo le expliqué otra vez que la nueva au pair se quedaría aquí para cuidarlo y jugar con el y le pregunte si estaba feliz…. Saben que me respondió??? “no”. Oh dios, casi me rompe el alma :(

Tengo 1 maleta lista, 1 por empacar y muchas cosas por regalar, asi que invité a las au pairs a que llenen su ropero de cuenta mia porque no tengo forma de llevarme todo lo que tengo. No quiero despedidas aquí ni bienvenidas en Colombia, aun nadie sabe que día voy. Lo único que quiero hacer es salir a comer con las au pairs un día de este fin de semana.

No se que más pasará antes de regresar a mi vida normal, tengo nervios, susto, estoy medio contenta, no se que esperar de la vida. El día antes de irme mis host quieren que pase la noche con ellos para darme un par de regalos. Yo también les compré un par de cositas a ellos y a mis niños.

Lloraré, extrañaré mucho mi vida en USA, pero las cosas pasan por algo y ahora es tiempo de regresar a casa. Gracias por seguir mis historias en esta inolvidable experiencia, ya contaré que pasa la próxima semana. Saludos desde el basement!